Esta moneda conmemorativa de 2 euros de Andorra de 2024 está dedicada al 100 aniversario de la llegada del deporte del esquí al Principado pirenaico. El esquí en Andorra tiene sus raíces en la década de 1920, cuando este pequeño país de los Pirineos comenzó a explorar el turismo de invierno. Aunque las primeras incursiones en el esquí eran modestas y limitadas a unos pocos entusiastas locales y turistas ocasionales, la idea de aprovechar las montañas nevadas de Andorra fue ganando terreno. En 1956, se inauguró la primera estación de esquí, Pas de la Casa-Grau Roig, marcando el inicio formal del desarrollo de la infraestructura turística dedicada a este deporte. Esta estación se convirtió en un punto de referencia y sentó las bases para la expansión de la industria del esquí en el país. Durante las décadas siguientes, Andorra experimentó un notable crecimiento en sus instalaciones de esquí. En los años 70 y 80, se abrieron nuevas estaciones como Soldeu-El Tarter y Arinsal, y se mejoraron las existentes. El país invirtió significativamente en la construcción de telesillas, telecabinas y otros servicios esenciales para atraer a más esquiadores y turistas. El enfoque en la mejora de la infraestructura y los servicios turísticos transformó a Andorra en un destino de esquí de renombre internacional. Además, la formación de instructores de esquí altamente cualificados y la creación de escuelas de esquí jugaron un papel crucial en la profesionalización del sector. En la actualidad, Andorra es sinónimo de turismo de invierno, con estaciones de esquí que compiten con las mejores de Europa. La fusión de estaciones en Grandvalira y Vallnord ha permitido a Andorra ofrecer vastos dominios esquiables y una amplia variedad de pistas para todos los niveles. La modernización continua de las instalaciones, junto con la promoción de eventos internacionales de esquí, ha consolidado a Andorra como un destino líder para los amantes del deporte invernal. La combinación de paisajes impresionantes, excelentes condiciones de nieve y una infraestructura de primer nivel asegura que el esquí siga siendo una parte fundamental de la identidad y la economía andorrana.